YA NO QUIERO LLORAR MAS

PÁJAROS DE BARRO

MANOLO GARCÍA


Por si el tiempo me arrastra a playas desiertas
hoy cierro ya el libro de las horas muertas.
Hago pájaros de barro,
hago pájaros de barro y los echo a volar.

Por si el tiempo me arrastra a playas desiertas
hoy rechazo la bajeza, el abandono y la pena.
Ni una página en blanco más,
siento el asombro de un transeúnte solitario.

En los mapas me pierdo
por sus hojas navego.
Ahora sopla el viento,
cuando el mar quedó lejos hace tiempo.

Ya no subo la cuesta que me lleva a tu casa.
Ya no duerme mi perro junto a tu candela.
En los vértices del tiempo anidan los sentimientos.
Hoy son pájaros de barro que quieren volar.

En los valles me pierdo,
en las carreteras duermo.
Ahora sopla el viento,
cuando el mar quedó lejos hace tiempo.

Cuando no tengo barca, remos ni guitarra.
Cuando ya no canta el ruiseñor de la mañana.
Ahora sopla el viento,
cuando el mar quedó lejos hace tiempo.

En los valles me pierdo,
en las carreteras duermo.


Hoy me siento irremediablemente triste. Esas cosas de la vida que no tienen explicación, esas sorpresas indeseables, esos golpes bajos. ¿Hasta cuándo vamos a llorar? El Desconsuelo de una mujer, embarazada de seis meses por perder al amor de su vida. El llanto desgarrador de una madre que pierde por segunda vez a un hijo. El dolor de unos padres que ven a su hija sufrir. El silencio, acompañado de lágrimas de un padre que no entiende por qué se le fue su hijo.

Hoy me duele el alma, hoy quisiera abrazar a mi hija para decirle que estaré con ella por siempre… Hoy quiero que la vida sea distinta. Hoy quisiera despertar de esta larga pesadilla de ocho meses. Hoy quiero liberarme de esta presión que me agobia. Hoy no quiero ser responsable de nadie. Hoy deseo que aquella vida que tanto extraño, regrese. Hoy quiero que mi mamá despierte una mañana sin decir que se siente mal. Hoy deseo que mis sueños se carguen de felicidad. Si esto fuera una simple cuestión de plazos, me encantaría que el año terminara y que nuestra vida volviera a la normalidad.

Los dejo con ésta, mi canción. Me apoderé de ella hace mucho tiempo y nadie me la va a quitar.

CASI 100%

YA ME FUI CASI COMPLETAMENTE PA' ACÁ...

ESTRENANDO DOMINIO

Acá los espero.... wwww.elawacate.com.ve

SI TIENES GANAS....

Lo que se encuentra una por la calle...

LA ULTIMA FRESCOLITA

Si, por los momentos es la última. Dentro de uno dos meses un nuevo chequeo para verificar que no haya sorpresas. Un mes de reposo, a partir de hoy y luego 25 sesiones de radioterapia (diarias). Hoy salimos de la clínica a las cuatro y cuarenta y seis minutos de la tarde. Mucha gente y, aparte, la negligencia de la secretaria del cardiólogo, que olvidó enviar el informe del eco cardíaco de mamá. La espera, como siempre bastante amena. Uno se sienta y siempre consigue con quien hablar. Me sentí bien animada hasta que subimos al piso tres. Cuando entré para escribir el nombre de mi mamá en la lista, allí estaba escrito el nombre de Arianne. Ya teníamos varias semanas sin verla, asi que en seguida levanté la mirada para ubicarla. No la vi, pero su mamá estaba sentada y me acerqué a saludar. Esperaba encontrar mejores noticias, pero Arianne, parece estar perdiendo la batalla. Después de cinco meses, hoy fué la primera vez que vi a su madre llorar. El corazón se me hizo pedazos. Después de haberlas visto luchar, debe ser horrible cuando escuchas decir que ya no hay mucho más por hacer. Debe ser horrible tratar de aferrarse a un milagro, cuando la realidad te golpea la cara cada mañana. La mamá de Arianne, salió a saludar a mi mamá, respiró profundo y le dijo que su hija estaba bastante mejor. No quiso decir la verdad, porque ya sabe que ese tipo de noticias no es bueno dársela a los compañeros de quimio. Un poco más tarde, se acercó hasta a mi y me pidió que le hiciera el favor de acompañar a Arianne hasta abajo, mientras ella buscaba su carro. Sin pensarlo le dije que si. Dios! cuando la ví, sentí un frío intenso y una tristeza que no puedo describir. Arianne está sumamente delgada y casi sin fuerzas para caminar. También le cuesta hablar. Irónicamente, a mamá le tocó el mismo cubículo de la primera vez y, la primera vez Arianne también se veía mal. Lamentablemente, en lo que quedó de tarde, no pude sentirme feliz. Llegamos a la meta, conseguimos nuestro objetivo. Esta vez, pediré con más fuerza por Arianne, por un milagro para ella y para su familia.