CASI LLEGANDO
Esta mañana fuimos a recoger el informe para llevarlo al IVSS. Los medicamentos fuertes deben consignarse unos días antes y luego se van a buscar. La primera vez pagamos la novatada e hicimos una cola de 3 horas sin saber que la cola de consignación era la más corta. Que se hace. Hoy nos tocó esperar desde las diez y media de la mañana hasta la una de la tarde. Sólo para esperar el turno, porque el trámite adentro no es tan largo. Se entregan los papeles y ellos entregan una notita. Mientras se espera, se ven muchas cosas... unas lamentables y otras que hacen sonreir. Lo que me llamó la atención, fué ver tantas chicas jovencitas embarazadas. Jovencitas, de catorce años para arriba... y recién paridas también. Triste realidad que se hace más fuerte cada día. Ya de regreso, con un poco de buena música y mucho calor. Mamá venía calladita pero en un momento del trayecto me sorprendió con una pregunta..."Hija ¿tú me perdonas lo que pasó el otro día?". Menos mal que fué en plena luz roja. Lloramos, la abracé y le dije que no tenía que pedirme perdón, que se perfectamente por lo que está pasando, por lo que estamos pasando juntas y que jamás la voy a abandonar. Rayos! que lagrimero. El resto del camino, no soltamos nuestras manos...
La vida sigue, de ésto solo sacamos más unión. No me canso de repetir que, a pesar de lo doloroso que ha sido el proceso, me siento bendecida y agradecida por haber estado a su lado. Aquí seguiré.