DIAS VAN, DIAS VIENEN

Hoy fue mi décima primera clase. Mi hermana se quedó con mamá mientras yo estaba en el Instituto. A pesar de estar tranquila, porque estaba bien cuidada, no pude abstraerme y disfrutar por completo. Pero bueno, recibimos una muy buena noticia. Mi compañera Maribel, acaba de enterarse que está embarazada. Bien por ella. De verdad que el grupo es fenomenal. Nos identificamos muy bien como tal. Además, una vecina acaba de venir a tocarme el timbre para decirme que mi gato está bien. Tenía varios días desaparecido y, para serles sincera, ya tenía dos noches que no podía parar de llorar por él. Mañana en la mañana, lo busco para llevarlo al Vet, porque tiene una pequeña herida en su oreja. Finalmente, mi hija decidió que no quería ir más a la gimnasia. Bueno, ya veremos que quiere probar ahora. Al parecer, hay cierta inclinación hacia el tennis.... que bien.

Cuando llegué a casa, encontré a mi mamá un poco más repuesta que ayer, pero con el mismo pesimismo a cuestas. Mis hermanos están preocupados por eso y yo, ni se diga. Cuando llegaron esta mañana al Centro Médico Docente La Trinidad para realizar la hematología, a mi mami la tuvieron que subir en silla de ruedas, porque apenas logra permanecer en pie por unos instantes. Los mareos siguen. Pero por su forma de hablar, se que su malestar es más consecuencia de la depresión. La entonación de sus palabras es distinta, he aprendido a conocerla. Me senté en la cama con ella y tomé su mano fuertemente. Le dije, llenándome de valor; "¿sabes qué mamá? tú si vas a poder, aquí estamos todos a tu lado para cuidarte y protegerte y, aunque no podamos darte nada para que te sientas mejor, te vamos a apoyar cada vez que lo necesites. Si Arianne puede, tú pedes". Ella me miró a los ojos y comenzó a llorar. Te quiero, le dije...". "Lo se hija y ustedes son mi razón de vivir".

Cada día parece ser distinto, las horas se hacen lentas, las noches más largas. Papá está muy preocupado, se le nota el agotamiento y la tristeza. Su compañera de hace cuarenta y un años se le ha debilitado y a él se le hace difícil soportarlo. Ayer me pedía que intentara hacerla comer un poco más y que se levantara a tomar aire fresco. Tenemos que entender, que mamá tiene días buenos y días malos. Tenemos que aprender tantas cosas. Estamos aprendiendo a vivir.