VACACIONANDO
Como nos sale casita en Semana Santa, pues ni modo. Me salió comprar piscina. Isa tenía una inflable, pero Caraota (la perrita de mi mamá) se dedicó a clavar sus dientes por todos los anillos. Esta es rígida, asi que no se puede meter con ella. El que estaba loquito por meterse en esa piscina era Beethoven, mi perro. Ese pobre si ha podido sufrir. Que se hace, los goldens aman el agua. No se metió, pero las niñas se encargaron de mojarlo bastante.
Para los que se van, mucho juicio en la carretera. Para los que se quedan, a disfrutar de la ciudad. Para todos, felices vacaciones.